COLUMNA DEBATE, FOTO DE MANLIO FABIO, ANA ISABEL ALLENDE, PABLO FERNÀNDEZ DEL CAMPO

DEBATE

Por Roberto Desachy Severino

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Manlio Fabio Beltrones, Ana Isabel Allende, Pablo Fernández y la profunda hipocresía del PRI de siempre

Los fraudes electorales de 1988, 2006 y 2012 a nivel nacional –todos cometidos o avalados por el PRI- y el robo descarado con que en 1983 se impidió que el PAN ganara por primera vez la alcaldía de Puebla, dejan muy en claro que si un partido político en México es antidemocrático, anticiudadano y profundamente corrupto y cerrado es el priísmo.

Por ello, llama la atención que personajes tan cuestionados como los priístas Manlio Fabio Beltrones, Ana Isabel Allende y/o Pablo Fernández del Campo se rasguen las vestiduras por la reforma electoral aprobada en Puebla la semana pasada, cuando el PRI es el culpable de que  México tenga una historia negra de fraude en los comicios.

Fueron miembros destacados de ese partido los que robaron la gubernatura de Chihuahua a Francisco Barrio y los que, con Carlos Salinas de Gortari y Manuel Bartlett Díaz al frente del tricolor, en 1988 violentaron el voto ciudadano, para impedir que Cuauthémoc Cárdenas Solórzano asumiera la Presidencia de la República, que había ganado en las urnas.

Gobernadores del PRI, como Mario Marín Torres, el "Góber Precioso", Ulises Ruiz y Fidel Herrera, entre otros, validaron el fraude electoral del 2006, cuando Felipe Calderón Hinojosa se apropió de Los Pinos al "haiga sido como haiga sido", como él mismo lo señaló en una entrevista de TV.

PRIÍSTAS: DEPREDADORES HISTÓRICOS DE LA CIUDADANÍA

¿Y el fraude electoral del 2012?, con Monex, Soriana y el entonces Instituto Federal Electoral (IFE), encabezado por el irredimible Leonardo Valdés Zurita, que se convirtió en un cómplice silencioso y pestilente de que el PRI con Peña Nieto haya superado en más de 4 mil 263 millones de pesos el tope de campaña.

No vayamos más lejos: en la pasada elección federal del 2015, el tricolor hizo que su lacayo, el PVEM, violara la ley cuantas veces se le dio la gana y el actual INE, con Lorenzo Córdova, se dedicó a ponerle multitas tontas, que el "niño verde", Jorge Emilio González, pagó muerto de risa…con el dinero de las prerrogativas que les da el mismo INE.

No solamente en asuntos electorales los priístas han sido depredadores históricos de la ciudadanía, sino que basta recordar las matanzas de Tlatelolco en 1968, el Halconazo de 1971 y las recientes masacres de Tlatlaya y Atoyzinapa, para entender que lo que menos les interesa a muchos priístas es, precisamente, la gente, la sociedad.

Por lo mismo, Manlio Fabio Beltrones, Ana Isabel Allende, Pablo Fernández del Campo y demás miembros del PRI que quieren rasgarse las vestiduras dizque en defensa de las candidaturas independientes, carecen de calidad moral y/o política, porque –históricamente- su partido ha sido el principal verdugo y azote de los ciudadanos.