DEBATE
Por Roberto Desachy Severino
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Inicio de campaña
Luego de un mes de veda electoral, que benefició al PRI, porque su candidato presidencial Enrique Peña Nieto no perdió puntos al mantenerse callado la mayor parte del tiempo y evitar temas o declaraciones espinosas, al fin comienza finalmente la campaña por la titularidad del Ejecutivo federal y el Congreso de la Unión.
Las últimas encuestas (SDP, Excélsior, El Universal, Reforma, Mitofsky) reflejan que Peña Nieto comienza la contienda con una ventaja de entre 12 y 20 puntos sobre Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador. Esto no es nada extraordinario, si se toma en cuenta que apenas en enero pasado la empresa demoscópica más proclive al PRI, Mitofsky, lo ponía más de 25 % delante de sus competidores.
Lo cierto es que Peña Nieto no cayó durante la veda electoral y, por el contrario, Josefina Vázquez Mota sí perdió varios puntos por sus tropiezos con la UNAM, la UIA y, sobre todo, la poca capacidad de reacción de su equipo, que no supo superar rápidamente dichos temas e hizo que la candidata panista se tardara 24 horas en pedirles disculpas a ambas universidades.
Habrá que esperar a las encuestas de la próxima semana, para constatar si la panista resultó favorecida o perjudicada con el tema de las grabaciones (portal La Silla Rota), aunque lo más probable es que no le sea de utilidad que los electores la hayan escuchado, primero, culpar a Alejandra de la Sota y Genaro García de espionaje y, después, tratar de salirse por la tangente responsabilizando al siempre desprestigiado PRI.
OPORTUNIDAD DESPERDICIADA DE DESLINDE DEL CALDERONISMO
La filtración de su plática con Agustín Torres dio a Vázquez Mota la oportunidad de deslindarse –desde el inicio de la campaña – de Felipe Calderón, Alejandra de la Sota, Genaro García y, en general, del actual gobierno federal que para el PAN tiende a ser mucho más un lastre que un trampolín, debido a que el presidente actual no fue el del empleo, sino el de las ejecuciones y del aumento de la pobreza.
Pero la candidata panista tuvo miedo, le dio frío deslindarse tan pronto de su ex jefe Felipe Calderón Hinojosa y reculó culpando al PRI, a Luis Videgaray y Peña Nieto del espionaje del que fue víctima en campaña. Al final de cuentas, los priístas siempre son los villanos favoritos de la historia moderna de México, aunque el PAN no ha tomado en cuenta que nadie en su sano juicio espera ética, honradez y decencia del priísmo.
El PRI gana elecciones por inercia, por desencanto ciudadano del PAN y PRD, por postular algún buen candidato o, como lo dicen las encuestas, porque la gente piensa que de por sí va a ganar. Por lo mismo, culparlo de las grabaciones a Vázquez Mota difícilmente contribuirá a mejorar o empeorar la imagen de los priístas.
RETO MAYÚSCULO PARA AMLO
AMLO enfrenta un panorama ambivalente, debido a que –según los mismos sondeos demoscópicos -se encuentra varios puntos debajo de Peña Nieto, pero Josefina Vázquez y el PAN todavía no logran deshacerse de él y generar en los ciudadanos la percepción de que es una elección presidencial entre dos solamente, como le hizo Vicente Fox a Cuauhtémoc Cárdenas en el 2000.
Hasta ahora, Felipe Calderón y el PAN no han logrado que la mayoría de los electores vean el voto por AMLO como una opción perdida. Incluso, el hecho de que tanto el papa Joseph Ratzinger como el vicepresidente de EUA, Joe Biden, lo hayan incluido en sus giras de trabajo por México, fortalece el mensaje de que sí es una contienda presidencial entre 3 y que Vázquez Mota no es la única opción, para impedir que regresen a Los Pinos los dinosaurios del tricolor.
Sin embargo, entre la opinión pública todavía se percibe como muy lejano un triunfo de AMLO y, por lo mismo, su reto inicial no solamente es el de seguir generando en la ciudadanía la percepción de que ya no es político que polariza, sino que también debe demostrar a los electores que puede ganar y convertirse en el 1er Presidente de la República de la izquierda.
