Por Roberto Desachy Severino
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Financiamiento limitado y encadenarse con la planta productiva, retos de la BUAP
Superar el tema del financiamiento limitado a todas las Instituciones de Educación Superior Públicas (IES), encadenarse con la planta productiva y aumentar la inserción laboral de sus egresados, son algunos de los retos que el rector de la BUAP, Alfonso Esparza Ortiz, enfrentará a partir de mañana, cuando tome posesión del cargo para el lapso 2013-17.
Durante la campaña por la rectoría de la BUAP, toda la comunidad fue escuchada y se elaboró un diagnóstico acerca de los retos que deberá afrontar en el futuro próximo y el 1ro será enfrentar el financiamiento limitado, sobre todo si se toma en cuenta que el país está a punto de caer en un despeñadero económico con un crecimiento del PIB apenas superior al 1 por ciento en este 2013.
Otro problema que debe enfrentar la universidad es el hecho de que los estudiantes llegan a la institución con una preparación académica desigual y, por lo tanto, se debe hacer un esfuerzo especial por equiparar su rendimiento escolar. Además, Esparza Ortiz y su equipo tendrán que aumentar la vinculación de la institución con el sector productivo, para que los alumnos se inserten rápidamente en el ámbito laboral.
Una situación que la BUAP ha afrontado durante todos estos años es la carencia de un plan estratégico de largo plazo para la educación superior en todo el país. También se tiene que aumentar la vinculación académica de la misma universidad con sus estudiantes, para dotarlos de elementos con qué enfrentar exitosamente un entorno laboral cada vez más globalizado y competido a nivel nacional e internacional.
BUAP, UNA INSTITUCIÓN FUERTE
Mañana que asuma su 1er período como rector electo en las urnas por los universitarios, Esparza Ortiz encontrará – y lo sabe al haber sido contralor, tesorero, secretario general y hasta representante sindical- una universidad líder en todo el país, en especial en la región sur-sureste. Además, prevalece en su interior un clima de estabilidad laboral y de calidad académica, cada vez con mejores procesos pedagógicos y de investigación.
La estructura organizacional en la BUAP es la adecuada y una de sus principales fortalezas es que es una institución plural, tolerante, abierta a todas las ideologías y corrientes de pensamiento, cada vez con mayor apertura a las expresiones artísticas, deportivas, que en los tiempos recientes ha aumentado sensiblemente su eficiencia y eficacia institucional.
La BUAP enfrenta la disyuntiva de cumplir con los requisitos de cobertura y calidad y, para superarla, el rector deberá llevar a la práctica su promesa de campaña de encabezar una administración enfocada en lo académico y en lo humanístico, donde la convivencia entre los universitarios sea estrictamente regida por las normas establecidas.
Incluso, Esparza Ortiz deberá asumir y cumplir claramente con otros dos ofrecimientos de campaña: colocar a los estudiantes y a la academia en el centro absoluto del quehacer institucional y terminar de despartidizar a la BUAP, porque una institución de esta magnitud es en sí misma un ente político; que, sin embargo, no debe volver a servir jamás como plataforma electoral, personal o de un partido.
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